martes, agosto 12, 2008

REALIDAD Y SUEÑO...


"Te amo Jessel, te amo, te amo...", fue lo último que me susurró al oído aquella dulce voz...

El sueño se materializó, su silueta cobró vida, sus caricias
tocaron mi cuerpo...sus labios humedecieron mi piel.
Estaba allí junto a ella, abrazándola, escuchándola, protegiéndola...amándola.
Era un sueño, un verdadero sueño, de esos que solo las películas pueden
hacer realidad.

Caminamos juntos narrando algunos acontecimientos de nuestras vidas...era todo hermoso, tan hermoso como un atardecer de verano.
La luz de la madre luna iluminaba su angelical rostro, aquella noche
su tierna risa conquistaba, aún más, mi honesto corazón.

Estaba nervioso, muy nervioso, pero lentamente comencé a tranquilizarme
mientras ella me protegía con un cálido abrazo.
Las horas pasaban con una cruel velocidad...pero eso no importaba
ya que estaba junto a ella,
el que parecía ser el verdadero amor de mi vida.
Su voz era dulce, sus gestos delicados, su mirada brillante y
sus labios demostraban ser el postre más delicioso.

Más tarde nos sentamos en una colorida habitación,
un lugar tranquilo...nuestro propio castillo.
Me pidió que me sentara junto a ella y mis nervios nuevamente comenzaron
a aparecer...sentía como si fuera a besar por primera vez.
Nuestros labios se juntaron tiernamente, volviéndome a recordar
el verdadero amor.
Acaricie su delicado cabello, la besé en la frente y comencé
a mirar cada rincón de su linda cara, como si dentro de mi ya supiera que no la volvería a ver más.
Le dije que la observaba para recordar cada detalle de su perfecto rostro,
mientras lo hacia notaba su nerviosismo...era como si ambos estuviéramos
viviendo la magia del primer amor.

Nos acostamos y comenzamos a descubrir nuestros cuerpos,
besos, abrazos y caricias fueron acciones que nacieron
para, simplemente, hacer surgir el fuego de la pasión.
Sus manos recorrieron mi cuerpo con delicadeza, experiencia y respeto,
mientras yo la besaba y acariciaba timidamente...como un niño
que recién aprende lo que es el sexo.

Fueron dos noches hermosas...pero la hora se acercaba,
ya era tiempo de partir.
Curiosamente ambos queríamos que la lluvia dejara caer sus
lágrimas en nuestra historia...y así fue, caminamos nostálgicos
en medio de un cielo que, quizás, lloraba nuestra separación.

La deje partir, no podía retenerla, Dios mio..no tenía más opción.
El rugido del motor sonó y las
malditas cuatro ruedas se movieron...la seguí con la mirada entre
lágrimas-que se mezclaron con la lluvia-la seguí con gestos desesperados, la seguí con el corazón desgarrado hasta el último momento en que se alejó.

Más tarde todo terminó, dejando en mi un traicionero vació.
Fue todo hermoso, perfecto y mágico, mucho más
de lo que esperábamos...pero el destino sentenció otra cosa,
separando nuestros caminos.

"Te amo Jessel, te amo, te amo...", fue lo último que me susurró
al oído aquella dulce voz...
Esas palabras fueron hermosas y tiernas,
pero lamentablemente para mi, era solo un sueño.
Así desperté el domingo, con esa sensación, con ese mágico sueño,
con una felicidad que lentamente se esfumó al saber que no era real.
Pese a ello, lo escuché tan nítidamente como si ella
hubiera estado conmigo esa noche...a mi lado, abrazándome.

El "Te amo" se ha había alejado de mi bruscamente, pero aquel día volvió,
surgió de las cenizas, de forma prácticamente real, aunque haya sido, solo un lindo sueño...

1 comentario:

Anónimo dijo...

"Te amo Jessel....te amo...desde siempre"

Mi bebé, prometo volver... recuerda a Sara y Jonathan...pasó un año y las señales no los abandonaron.... Ya pasará todo...necesito tus abrazos también...

"Te amo Jessel... te amo"